24.10.07

PARA LITE Y PARA PINKI

Durante un tiempo viví frente al cementerio en una vieja furgoneta Ford destartalada. Era un lugar tranquilo casi siempre excepto las Mañanas de Domingo en que se llenaba de visitantes. Yo aprovechaba la concurrencia para intentar ganarme el pan de cada día pero, la verdad, tenía muy poca suerte. De manera que me veía obligado a bajar al pueblo dos o tres veces por semana a rebuscar por los contenedores. Y eso en estos tiempos es una tarea peligrosa. Creedme.

Aquel desfile dominical era para mí de lo mas curioso, la gente llegaba con sus coches impecables, sus ramos de flores, vestidos para la ocasión con lo mejor que tenían. Venían familias enteras a veces. Yo intentaba no molestar al tiempo que les hacía ver mi necesidad, pero como ya os he comentado a aquellas personas no les sobraba buena voluntad. Algunos incluso eran agresivos conmigo. Y puedo denunciar claramente que los peores eran aquellos pequeños cursis y emperifollados nazis de mierda. Me lanzaban miradas tan pendencieras que, estoy seguro, de no ser porque iban de la mano de sus abuelitas no tendrían reparo en patearme la cabeza bien pateada. Angelitos.

Allí perdí la noción del tiempo. Una tarde la grúa municipal se llevó mi casa, traté de impedirlo por todos los medios pero aquellos energúmenos eran más que yo. Así que tuve que dejar que se llevaran la vieja Ford, y aún puedo considerarme con suerte porque uno de ellos, bajito y con bigote, no paraba de amenazar con llevarme a mí también. No dejó de llamarme hijo de perra hasta que doblaron la esquina y se metieron en la autovía. Cabrones.

Sin techo fue todo más difícil aún. Hasta que una noche escuché un ruido al otro lado de la tapia del cementerio. Aquel día no había comido nada y el anterior tampoco de manera que mi estado de ánimo era nefasto, así que decidí no hacer caso. Pero al poco rato se repitió. Me levanté de mis cartones más por miedo que por curiosidad, la verdad sea dicha, y me acerqué a la muralla. Entonces el ruido se hizo mucho más evidente y pude escuchar incluso un par de voces que conversaban en voz muy baja. Intuí que allí estaba ocurriendo algo anormal y me fui hasta la puerta de enrejado para intentar meter la cabeza y observar. Y los vi. Profanadores

Eran dos y ya tenían el trabajo bastante adelantado. La verdad yo no soy un héroe, ni tan siquiera un valiente, pero al ver aquello, ( y aprovechando que se acercaban un par de luces), me puse a hacer todo el ruido que pude con la intención de espantar a aquellos dos y de alertar al coche que se acercaba. Supongo que mi reacción se debió a que después de pasar tanto tiempo a las puertas del cementerio de alguna manera consideraba que aquellos muertos eran un poco míos, al menos eso es lo que he oído que se rumorea por ahí. Lo demás fue suerte. Que aquellas luces que se acercaban fueran las del coche de policía que pretendía echarme de allí, que aquella tumba fuese la del más intachable y respetado hombre santo del lugar y todo aquel rollo de héroe romántico y providencial que se montaron entre unos y otros me vino rodado y me cambió la vida y yo, por supuesto, no los contradije. Mejor ser alguien que ser un piojoso perro sin raza. Creedme.

11 comentarios:

Unknown dijo...

si los muros de los cementerios hablasen....
de todas formas en una sociedad tan hipócrita no resulta ningún pecado serlo por omisión o mimetización
salud camarada Bandini

Ra dijo...

Joder, ME GUSTA.

Lilo dijo...

Uf!!! Vivir al lado de un cementerio, me eriza la piel... la idea.
Aunque por ahí mi madre siga diciendo que hay que temerle a los vivos, no a los muertos.


Cariños.

Mararía dijo...

Según lo fui leyendo me parecía que era verdad.

Un saludo.

Nouvinguda dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Ra dijo...

Sr. Bandini...fué en defensa propia, le dejo el encargo forzoso computado.
Mua

Anónimo dijo...

Bonito relato.
Meu pai sempre decía que o cementerio era o sitio máis sejuro...

Mr Tichborne dijo...

"Emperifollados nazis de mierda", que grande...
Se te animas, convideite ó xogo ese das oito cousas. Pásate polo meu bló para saber máis. Sen compromiso.

Mararía dijo...

Me paso por aquí de novo para agradecerche a tua visita. Xa andiven por aquí con anterioridade, e gústame.

Un saúdo.

mariademallou dijo...

un relato mui chulo ! mola ;)

Anónimo dijo...

cuantos recuerdos de Lite...