En mi armario tengo 5 trajes como casi todo el mundo, excepto los nudistas claro. Los nudistas van por ahí en cueros con un cierto aire de superioridad. También hay quien tiene solo uno, de camuflaje para mimetizarse en la ocasión, son gente humilde en escrúpulos.
Si alguna vez, por conciliar, intento ponerme el traje del PP desisto de inmediato. Simplemente no me cabe por las piernas, por más que lo intento me aprieta en los gemelos y no soy capaz de subirlo más allá de las rodillas.
El del PSOE si no hay otra solución sí soy capaz de ponérmelo, aún que se ve a las leguas que no me sienta bien. No está hecho para mí. Pero sirve para salir de un apuro. El inconveniente que tiene es que cuando me lo pongo mi familia me confunden con otra persona. Y mis amigos me hacen cantar el santo y seña para dejarme pasar al fortín.
Del traje nacionalista me sientan bien los pantalones, me quedan que ni pintados se diría que están hecho por mi propio sastre. Pero por más que me ponga a régimen no consigo abrocharme la chaqueta, no me cabe dentro el pecho. Cada vez que me miro al espejo pienso lleno de estupor “ ¡qué contrahechos son estos nacionalistas joder”! . Así que me pongo los pantalones solamente y salgo a pasear.
Mi traje favorito es el de IU, reconozco que necesita tintorería urgente y que si tuviera ocasión le haría algunos retoques aquí y allá, pero esencialmente me sienta bien. Tiene la ideología un poco raída y el corte algo pasado de moda pero me gusta. Cuando me lo pongo para ir a trabajar soy consciente de que dejo en el ascensor un ligero tufillo rancio a naftalina. Pero supongo que se le irá pasando con el uso, demasiado tiempo en el armario no es bueno para nadie.
El otro traje no me lo he puesto nunca, me lo regalaron cuando nací y está lleno de arrugas, moralinas y mandamientos. Además a veces , por la noche, cuando todo está en silencio me parece escuchar como me abronca desde el armario y eso no se lo consiento. Si mi padre con ser mi padre jamás me levantó la voz, como comprenderéis no voy a consentírselo a un mamarracho cualquiera por muy solemne que sea su traje.
Salud y suerte
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9 comentarios:
Con su percha, Sr.mío, no necesita ningún patrón hecho.
Abrazo, Bandini.
Yo le doy un diez a su texto porque la talla de su lucidez es la XXL.
Ya me jode tener que firmar como anónimo con lo exhibicionista que soy.
A. Doinel
Moi bo, moi bo...
A min pásame aljo polo estilo, debemos ter medidas parecidas, pero estou pensando en poñerme desta vez o traxe do PSOE, máis que nada a efectos prácticos (xa sei que isto é moi criticable, acepto o cachete), porque sejuramente será vestido dese xeito como máis dano lle poda facer ós que tanto nos berran, e porque doutra maneira, ó mellor, métenme á forza dentro dun traxe do PP...
Bien, yo tengo mil trajes que no uso, sólo por convicciones propias y manías.
Salud...
nunca fui de traje, yo me declaro incapaz de soportar esas hechuras que te obligan por disciplina de partido a caminar erguido, enarbolar banderas y corear consignas....
pero estaría dispuesto a probarme un traje diseñado por alguien como ud.
sinceramente coincido tanto con Doinel que no se para que escribí lo de arriba
pd: una consigna...
NO A LOS POLITICOS PROFESIONALES
y mucho menos si son constructores
Sr. Bandini, le hice una invitación y sólo me fue a ver una vez...
Espero las muchas proximas visitas...
JA JA JA
Espero haya recibido mi presente en su mail...
Amigo Bandini, aquí estoy para lo que sea menester
Bandini, echo de menos un cuento suyo.
excepcional!!!
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