Hace ya años llevé a mis padres a una fábrica de confección de A Estrada regentada por un vieja amiga de mi madre. En la pared había una pintada que rezaba así “Manolito es la ostia”, no conozco al tal Manolito pero seguro que merecía el piropo. Al lado de esa había también una advertencia de los dueños de la fábrica “ No tener miedo a los perros”, cosa harto difícil teniendo en cuenta que eran dos tremendos mastines.
En fin las dos me parecieron, y me lo siguen pareciendo, muestras grandiosas de poesía popular. Hay trozos de pared que merecen estar en las bibliotecas, o tal vez no si pensamos que las bibliotecas suelen estar llenas de gilipollas y de gilipolleces.
No sé porque estoy contando esto porque en realidad hoy no me apetece nada escribir, lo que me apetece es salir a beber y beber y cantar…….
El corazón bien caliente
los ojos en la cerveza
en casa de la gorda Adriana de Montalant,
con el amigo Jojo
y con el amigo Pierre
íbamos a beber nuestros veinte años.
Jojo se creía Voltarie
y Pierre Casanova,
yo que era el más orgulloso
me creía yo mismo.
Y cuando hacia media noche pasaban los notarios
que salían del hotel de los Tres Faisanes
les mostrábamos el culo y nuestra buena educación
cantándoles
Los burgueses son como los cerdos
cuanto más viejos más asquerosos,
los burgueses son como los cerdos
cuanto más viejos más asquerosos.
El corazón bien caliente
los ojos en la cerveza
en casa de la gorda Adriana de Montalant,
con el amigo Jojo
y con el amigo Pierre
íbamos a quemar nuestros veinte años.
Voltaire bailaba como un vicario
y Casanova no se atrevía,
yo que seguía siendo el más orgulloso
estabacasi tan borracho como yo.
Y cuando hacia media noche pasaban los notarios
que salían del hotel de los Tres Faisanes
les mostrábamos el culo y nuestra buena educación
cantándoles
Los burgueses son como los cerdos
cuanto más viejos más asquerosos,
los burgueses son como los cerdos
cuanto más viejos más asquerosos.
Los ojos en reposo
la mirada caída
en el bar de los Tres Faisanes,
con el señor Jojo
y el señor Pierre
entre notarios se pasa el tiempo.
Jojo habla de Voltaire
yPierre de Casanova
y yo que sigo siendo el más orgulloso
yo hablo todavía de mí.
Y es al salir, Señor Comisario,
que todas las noches desde la casa de la Montalant
jóvenes cabrones nos muestran sus traseros
cantándonos
Los burgueses son como los cerdos
cuanto más viejos más asquerosos,
los burgueses son como los cerdos
cuanto más viejos más asquerosos.
J. Brel.
¡Ah, Bandini! ya tienes un año más.
